Empieza por elegir la solución perfecta para almacenar
Cobertizo de jardín
Una opción amplia y resistente para guardar los muebles más voluminosos plegados o desmontados. También, sombrillas, barbacoas y cojines. Fabricada en metal y con buena ventilación, protege tus accesorios de jardín del clima y mantiene todo bien organizado.
Armarios de exterior
Perfectos para guardar complementos de jardín como cojines, manteles, productos de piscina o pequeñas herramientas. Su estructura de madera con techo inclinado y puertas con lamas protege del sol, la lluvia y la humedad, tanto en balcones como en terrazas.
Baúles de exterior
Ideales para guardar objetos de uso frecuente como cojines, juguetes de exterior o textiles de jardín. Su diseño con lamas favorece la ventilación, y la madera resistente al agua los convierte en una opción práctica y decorativa. Además, puedes usarlos como banco extra.
Descubre más opciones de almacenaje exterior
Las fundas completas los mantienen como nuevos, temporada tras temporada
Funda para sombrilla de jardín
Protección total contra el clima: impermeable, resistente al viento y duradera. De tela Oxford con cremallera y cordón para un ajuste rápido y seguro. Ideal para exteriores.
Funda para columpio de jardín
Funda resistente e impermeable, con protección UV y sistema antiventisca. Mantén tu columpio protegido durante todo el otoño e invierno.
Funda para banco de jardín
Diseñada para sofás de dos plazas, esta funda impermeable con cintas en las esquinas se ajusta perfectamente incluso en días de viento y lluvia.
Más fundas para muebles de exterior
10 consejos para alargar la vida útil de tus productos de exterior
1. Limpia y seca antes de guardar
Lava fundas, cojines, lonas o cubiertas con agua tibia y jabón suave. Antes de almacenarlos, asegúrate de que estén completamente secos para evitar moho y malos olores.
2. Revisa tornillos y uniones
Comprueba que estructuras, tornillos y tuercas estén bien fijados. Apriétalos si es necesario para evitar que se aflojen durante el almacenamiento.
3. Lubrica las partes móviles
Aplica un poco de lubricante en bisagras, ruedas, columpios o balancines para prevenir el óxido y conservar su funcionamiento.
4. Protege la madera y el metal
Aplica tratamientos protectores en muebles de madera natural una o dos veces al año. Para los metálicos, revisa que no tengan rozaduras y usa productos anticorrosión si es necesario.
5. Cuida cables y baterías
En productos eléctricos (luces, fuentes, vehículos infantiles…), guarda los cables enrollados y las baterías por separado, en lugares secos y frescos.
6. Desmonta toldos vela y textiles de las pérgolas
Retira las lonas de toldos vela, pérgolas o carpas durante los meses de viento o lluvia. Guárdalas limpias y secas, y asegúrate de que las estructuras estén bien ancladas si se quedan montadas.
7. Eleva los muebles del suelo
Si guardas productos en garajes o trasteros, colócalos sobre palets o bases elevadas para evitar el contacto con la humedad del suelo.
8. Ventila los espacios de almacenamiento
Si usas cobertizos, armarios o baúles para guardar, ábrelos de vez en cuando para permitir la circulación del aire y evitar condensaciones.
9. Organiza las piezas pequeñas
Guarda tornillos, conectores, llaves Allen u otras piezas desmontables en bolsas etiquetadas para que no se pierdan de una temporada a otra.
10. Planifica el mantenimiento de temporada
Anota una fecha para revisar el estado de tus productos al inicio de la siguiente temporada y tenerlo todo a punto sin imprevistos.
Lava fundas, cojines, lonas o cubiertas con agua tibia y jabón suave. Antes de almacenarlos, asegúrate de que estén completamente secos para evitar moho y malos olores.
2. Revisa tornillos y uniones
Comprueba que estructuras, tornillos y tuercas estén bien fijados. Apriétalos si es necesario para evitar que se aflojen durante el almacenamiento.
3. Lubrica las partes móviles
Aplica un poco de lubricante en bisagras, ruedas, columpios o balancines para prevenir el óxido y conservar su funcionamiento.
4. Protege la madera y el metal
Aplica tratamientos protectores en muebles de madera natural una o dos veces al año. Para los metálicos, revisa que no tengan rozaduras y usa productos anticorrosión si es necesario.
5. Cuida cables y baterías
En productos eléctricos (luces, fuentes, vehículos infantiles…), guarda los cables enrollados y las baterías por separado, en lugares secos y frescos.
6. Desmonta toldos vela y textiles de las pérgolas
Retira las lonas de toldos vela, pérgolas o carpas durante los meses de viento o lluvia. Guárdalas limpias y secas, y asegúrate de que las estructuras estén bien ancladas si se quedan montadas.
7. Eleva los muebles del suelo
Si guardas productos en garajes o trasteros, colócalos sobre palets o bases elevadas para evitar el contacto con la humedad del suelo.
8. Ventila los espacios de almacenamiento
Si usas cobertizos, armarios o baúles para guardar, ábrelos de vez en cuando para permitir la circulación del aire y evitar condensaciones.
9. Organiza las piezas pequeñas
Guarda tornillos, conectores, llaves Allen u otras piezas desmontables en bolsas etiquetadas para que no se pierdan de una temporada a otra.
10. Planifica el mantenimiento de temporada
Anota una fecha para revisar el estado de tus productos al inicio de la siguiente temporada y tenerlo todo a punto sin imprevistos.
